- May 27, 2016
- Pedro Vargas
- Accidentes, Drogadicción, Intoxicaciones, Jóvenes, Marihuana, Padres, Para Doctores, Salud Pública
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De Medscape, el instrumento electrónico de información médica y educación nos llega un resumen de los resultados del trabajo de investigación longitudinal del Dr. Edison Manrique-García y su grupo (American Journal of Psychiatry, versión electrónica del 22 de abril de 2016), del Instituto Karolinska, en Estocolmo, Suecia, sobre el consumo intenso de marihuana y el pronóstico de muerte temprana.
Hombres de 18-19 años de edad, suecos, con un consumo alto de cannabis (más de 50 veces durante la adolescencia) tienen 40% más probabilidades de morir antes de los 60 años de edad, que aquellos que no consumieron marihuana. Otro argumento científico en contra de la creencia –ya no tan ingenua- de quienes aseguran que la marihuana no es nociva.
Lo que se sostiene está en la dirección de lesiones que llevan a la muerte, ya sea de forma accidental y deliberada, y sin ninguna relación entre el diagnóstico de trastornos psicóticos y consumo de cannabis.
Es importante, como lo señala el autor, de que estos hallazgos contradicen los resultados de un estudio publicado en 1990. La diferencia es que el actual estudio tiene un seguimiento mucho más prolongado en el tiempo, lo que favoreció la observación, entre los miembros de la cohorte de estudio, de las probabilidades de los efectos somáticos nocivos del uso de cannabis.
Discuten los autores la eventualidad de que quienes consumían de esta forma significativa siguieran haciéndolo en edades posteriores, conociendo que entre consumidores habituales tempranos, hasta un 50%, por lo menos, se harán dependientes de uso diario.
Aunque el riesgo de mortalidad prematura pueda considerarse moderado y estar los resultados influidos por variables pobremente controladas, como el consumo de alcohol y tabaco, si no prominentes, más regulares entre los consumidores de marihuana; este estudio tiene relevancia por lo extenso del seguimiento de los individuos en el estudio. Este será el “caballito de batalla” de quienes siguen propagando que el consumo de marihuana es inocuo. Aún así, si el hecho es que el consumo de la marihuana podría relacionarse a otros riesgos de muerte que se acumulan, como la conducta riesgos, el consumo de alcohol o de otras drogas y el tabaco, ya esto es suficiente elemento de preocupación, que no se resuelve diciendo que la marihuana es completamente inocua.
Una cosa sí es cierta, el consumo intenso lleva a un consumo continuado. ¿Cuánto del riesgo de muerte prematura es por el consumo intenso en la adolescencia y cuánto por el consumo continuado hasta la adultez? es algo interesante de investigar. El consumo intenso en la adolescencia está, eso sí, señalando que de allí en adelante las cosas no son tan benignas y las noticias no tan buenas. Entonces, el riesgo lo constituye el consumo de la marihuana.
Es importante reconocer, como dice uno de los expertos consultados sobre el estudio, el Dr. Richard Saitz, de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Boston, “se puede uno plantear cuán buenos deben ser los datos cuando hay un riesgo de año grave. Por lo general necesitamos menos evidencia para advertir con respecto al daño que con respecto al beneficio. Se requerirán más estudios aleatorios».