- Nov 27, 2019
- Pedro Vargas
- Atención médica, Catarro, Consulta Médica, Cultura médica, Medicalización, Medicamentos, Medios, Medios electrónicos, Narrativa Médica, Padres, Tecnología
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– “estornudó”, dice el lacónico mensaje
– Y…
“Name that tune with one note” era uno de mis programas favoritos de la televisión norteamericana cuando vivía en EU por mis estudios. En el pequeñín apartamento de la Universidad de Tulane, participábamos Angélica y yo como si fuéramos los concursantes. Divertido y sin riesgos.
La consulta médica no es un ejercicio de adivinanza. Es un encuentro con muchos interrogantes y mucha información. Por ello, una consulta de 3 minutos no existe solo para los padres apurados y que todo lo resuelven con “un antibiótico, por favor”.
Tampoco es el “estornudo” una razón para salir corriendo a la farmacia a medicar. Antes lo he señalado con seriedad y oportunidad, “la medicalización” no es exclusiva de los médicos, como se denuncia con alguna frecuencia, es además una forma de vida de las personas enfermas o de quienes cuidan y se esmeran por la salud de sus familias. Conlleva un riesgo enorme: empeorar la enfermedad o crear una enfermedad.
No hay como el tiempo para ver mejor el paisaje. En el curso del día, porque los estornudos son más frecuentes en la mañana cuando la mucosidad nasal normal se mueve hacia la nasofaringe con el cambio de posición de acostado a sentado o parado, usualmente aparecerán otras molestias o síntomas que mejoran la oportunidad de hacer con certeza un diagnóstico.
Esta nueva forma de hacer consulta, “estornudó”, es como el de la fotografía sin explicación, parte del nuevo léxico que el celular ha introducido nocivamente.