Referencia:

Lyoo IK et al: Mol Psychiatry 2015;Feb 10

Ahora, estimulados por los hallazgos probados y disímiles de un mayor daño cerebral en adolescentes que en adultos que fuman marihuana, este grupo miró el cerebro -con estudios de neuro imágenes- de adultos (60) y adolescentes (60) no consumidores de metanfetaminas, y los comparó con los de adultos (54) y de adolescentes (51) consumidores. Todos estuvieron controlados por uso de cigarrillos y alcohol, como por historia familiar de consumo de metanfetaminas.   En otras palabras, los hallazgos no se podrían imputar a estos otros factores.

Los hallazgos son contundentes: hay diferencias significativas con respecto a los controles (no consumidores). La corteza cerebral es más delgada (atrofia cerebral) en las regiones órbito frontales, en el precúneus y en el hemisferio parietal inferior (sustancia gris cerebral), como a lo largo de los tractos neuronales de la sustancia blanca cerebral. En los cerebros de los adolescentes consumidores estos hallazgos son aún más dramáticos cuando se comparan con los cerebros de los adultos consumidores. Las funciones ejecutorias de los adolescentes se notaron mucho más afectadas que las de los adultos.

Es necesario que enfaticemos que, las noticias periodísticas y las alusiones en los medios sociales de comunicación, en el sentido de que la marihuana y algunos fármacos psicotrópicos tienen una función terapéutica benigna pueden llevar erróneamente a pensar que, efectivamente, no se produce daño en el cerebro y la función cerebral en consumidores.

Es también preciso señalar que ese daño que sí se produce es más extenso, más profundo e irreversible cuando el consumo es entre adolescentes y adultos jóvenes. Esto lo deben saber los pacientes y los padres. Por el otro lado, medicamentos psicotrópicos   son usados muy liberalmente por nosotros los pediatras y los psiquiatras, sin buena justificación y sin considerar que ello podría tener resultados nocivos en poblaciones pediátricas en desarrollo. El daño cerebral es dependiente de la edad del consumidor.